Vivimos actualmente una OPERETA
POLITICA donde el único lujo que no han podido darse las clases sociales es el de disfrutar de la vida democrática, ni
de las prácticas democráticas que han ido conociendo la sociedad ecuatoriana;
Los políticos han preferido encerrarse y dar la espalda al desarrollo de las
ideas y a veces hasta el progreso material para defender en forma mezquina a lo
particular a ultranza, aunque para ello tengan que atentar contra la
civilidad y sin pensarlo contra la misma
racionalidad donde ha mutado sus técnicas al siglo XXI por los herederos del
VELASQUISMO.
No olvidemos que el Velasquismo,
sería la síntesis que engendrarían el personalismo fanático de García Moreno y
el caudillismo popular de Eloy Alfaro. Había en este momento creado el
presidencialismo ecuatoriano su propio vehículo sociológico: El populismo: en
el que todavía se desplaza cómodamente en la actualidad (2020). Velasco Ibarra,
fue el último gran caudillo de los terratenientes ecuatorianos y por lo tanto,
aseguro que sería el último gran AUTOCRÁTA que conozca este País donde desde aquel
momento hasta el actual muchos de los hijos o parientes de los prominentes
VELASQUISTAS gozan de esa riqueza mal habida y desenfrenada asegurando el futuro
de sus descendientes posiblemente de 3 o 4 generaciones, pues, aunque todos los
políticos ecuatorianos quieran imitar a Velasco Ibarra en estas elecciones 2021,
solo consiguen ahogar la confianza colectiva, en un populismo cual pantano
descompuesto, donde infesta todos los rincones de la vida pública y en donde naufragan
funestamente para siempre; la economía cerrada y concentradora de la riqueza y
el presidencialismo constitucional ha reinado como sistema de gobierno y así lo
he visto desde que tengo uso de razón.
Lo que avizoro es que desde hace
49 años los herederos del VELASQUISMO han seguido los pasos de sus padres o
familiares y han sabido cubrir estas huellas que dejó el gobierno de Velasco
que, para mi concepto fue un hombre íntegro que jamás uso fondos estatales para
hacerse rico, cosa tal que no puedo decir de quienes los rodearon y sus
descendientes. ¡MATEN A LOS VIEJOS
PARA QUE NO SE SEPA LA HISTORIA!
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