CRIPTORQUIDIA POLÍTICA

Hasta el día de hoy el Ecuador vive una acefalía de liderazgos en el ámbito político, porque en el ámbito de la corrupción tenemos identificados plenamente a estos maestrantes y otros PhD en mañoserias, acuerdos por debajo de la mesa o simplemente compra de conciencias, y esto se ve reflejado automáticamente en la Asamblea Nacional, donde tenemos sargentones y lacayos de intereses partidistas o personales del caudillo de turno que se rehúsa a jubilarse después de haber lucrado y perjudicado a la Patria desde la década de los 80 y otros desde el 79, estos aún sobreviven porque se creen “iluminados” porque otorgan mejores vidas a su plantilla doméstica que han sido ascendidos al rango de políticos, tanto así que, el actual mandatario los tiene identificados e incluso han tenido coincidencias políticas en el largo trajín electoral o por designación.
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Actualmente la ciudadanía gracias a las redes sociales hemos podido darnos cuenta de lo que realmente sucede dentro de la clase política putrefacta que emanan olores pestilentes a miseria intelectual y espiritual, donde acuden impresentables, dormilones o empleados domésticos del caudillo recalcitrante para desgarrar la patria y así poder complacerlos; Hoy un ex socialcristiano como Cesar Rohon nos ha dado una lección valiosa, una lección de no dependencia de su curul sino a los intereses para la cual fue elegido y, al ver tantos monstruos dignos de exterminio político para nuestra sociedad, HOY es obligación que el presidente Guillermo Lasso tome la decisión testicular (sin importar lo que digan los asesores Ad Honorem) para disolver la Asamblea Nacional y enviarlos a sus casas para obtener un borrón y cuenta al País con la nueva generación de ciudadanos, dándole oportunidades a cuadros que nazcan de las entrañas de la ciudadanía para no permitir que los hijos, hijastros, entenados, sobrinos, cuñados o algún parentesco familiar consanguíneo de los políticos que están vigentes sigan de testaferro en lo político, puesto que, sin explicación alguna a pesar de su insolvencia moral siguen tomando las decisiones equivocadas a nombre del pueblo soberano del Ecuador, ergo, es momento de dibujar un antes y después en nuestra historia, una historia que debe ser reescrita por la nueva generación, para que esta herencia política insalubre que nos están dejando los de siempre (Uds. conocen quienes son) no vuelva a pasar y es mejor repudiarla antes que nos consuma enviándonos al naufragio social, político y económico; Es momento que la juventud realice una cirugía profunda para no padecer nunca más de CRIPTORQUIDIA política que tanto padecen los actuales políticos del Ecuador.
 
¡ES MOMENTO DE UNA QUIMIOTERAPIA SEVERA A LA METASTASIS POLÍTICA QUE VIVIMOS, Y SE LLAMA MUERTE CRUZADA!
 
Ab. Jaime Andrés Véliz Ortiz

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